
He aquí algunas de las razones por las que disfrutamos tanto de nuestro trabajo. Después de dos años de intentar quedarme embarazada y no tener éxito, busqué la ayuda de Shen Dao. Lo que realmente aprecié en Shen Dao fue el hecho de que, aunque me advirtieron de los riesgos de mi edad y de las dificultades para quedar embarazada, también me ofrecieron una gran ayuda, información y consejos sobre cómo mejorar mis posibilidades. Resultado final: me quedé embarazada. Se requiere mucho compromiso, pero funcionó.
No podía soportar la idea de estar toda mi vida sin cumplir ese sueño de tener un hijo, aseveró. Godsall tenía un deseo profundo por tener un bebé, y en un principio pensó que no podía lograrlo sin un esposo. Cuando platicó con un consejero, supo que había otra posibilidad: No tengo que tener un hombre, ni tener relaciones sexuales. Puedo hacer esto sin ninguno de los dos. Así que lo hice, señaló. Kimberley acudió a Care Fertility, una institución especializada en fertilidad en la que confió para su proceso de convertirse en madre. Allí obtuvo la ayuda de una consejera. Kimberly estaba decidida a ser madre y a la edad de 33 años se dirigió al Banco Europeo de Semen en Dinamarca, a través del internet, para elegir un donante. Para ello, pagó 1, libras esterlinas Unos 2, dolares estadounidenses y se sometió a inseminación artificial.
En primera instancia había analizado otro libro, pero cuando me enviaron el boceto que tienen a estudio, me di cuenta de que sufrió algunas modificaciones, que lo mejoraron mucho. Voy a analizar cada uno de los efectos. La primera pregunta que me surge es si es necesaria la ley como marco regulador y de aplomo jurídica. Todo indicaría que sí. Aun ahora se funcionó bien, pero sin seguridad jurídica. Por lo tanto, soy partidario de que exista una ley. Parecería que sí. Es un principio de equidad y de justicia distributiva de la bioética que así se haga. Serían una discapacidad o disfunción.
Ya para este tipo de tratamientos estamos al principio, no así en el camino de ser padres. Muchísimas gracias por el magnifico trabajo y por haber hecho posible que una cosita tan maravillosa esté ahora mismo durmiendo en su cuna. Llegamos a la clínica URH García del Real desesperados, abatidos y sin aliento, con nuestro matrimonio hecho añicos gracias al adivinación desafortunado que vivimos anteriormente. Laura Blasco, la cual nos dio una dosis de oxígeno extra para que tuviéramos algo de aliento para la maravillosa aventura que íbamos a vivir. Conocimos a Almudena, Belén y Bea, lecho mía! El destino caprichoso también quiso que conociéramos a profesionales tan maravillosos como son el Dr. Borja García, el Dr. Felipe Villacampa, y la Dra. Esa frase hizo que apareciera en nuestras caras una sonrisa perfectamente de nervios, de miedo, de noche, de…miles de cosas.