
Introducción [1] 1. Un mundo que busca respuestas 2. Al abordar este proyecto, no es posible hacer abstracción de la coyuntura actual. Todo ello ejerce un influjo profundo sobre la conciencia moral de muchas personas y grupos, hasta el punto de que tiende a desarrollarse una cultura fundada sobre el relativismo, la tolerancia y la apertura a novedades, no siempre ahondadas suficientemente en sus fundamentos filosóficos y teológicos. Nuestro trabajo no pretende remplazar al de los filósofos y teólogos moralistas. Una exposición adecuada de los problemas concretos puestos por la moral precisaría de un ahondamiento racional y también de una exposición de las ciencias humanas que desbordan claramente el campo de nuestra competencia. Pese a que, sin embargo, la misma Biblia provee al lector de algunos criterios metodológicos aptos para facilitar este camino.
El Señor le dijo: —«He visto la opresión de mi pueblo en Egipto, he oído sus quejas contra los opresores, me he fijado en sus sufrimientos. Voy a bajar a librarlos de los egipcios, a sacarlos de esta tierra, para llevarlos a una tierra fértil y espaciosa, tierra que mana leche y miel. Éste es mi nombre para siempre: así me llamaréis de generación en generación. El Señor es compasivo y misericordioso.
Sin embargo, las Escrituras no necesariamente prohíben que un cristiano beba cerveza, alcohol, o cualquier otra bebida que contenga alcohol. De hecho, algunas Escrituras hablan del alcohol en términos positivos. Eclesiastés instruye bebe tu vino con alegre corazón. El Salmo dice que Deidad da vino que alegra el afectividad del hombre. Amós habla de beber vino de su propia viña como una señal de la bendición de Dios.

El arca de Noé se había posado en el monte Ararat, símbolo del eje y del pilar cósmicos, Noé fue el primero que cultivó vides y elaboró el vino con el que se produjo la primera bimba de la historia. Los hermanos de Cam, Jafet y Sem, en lugar de sumarse a las chanzas, taparon la desnudez de Noé. También para los cabalistas la denominación de alcohol en hebreo, yain, tiene un valor esotérico oculto, ya que posee el mismo valor numérico, 70, que el vocablo cuyo significado es misterio, sod. Todavía no ha llegado mi hora.
Siempre digo que. Cada individuo me inspira un actitud, y por lo partida, lo que digo. Me gusta que. Me susurren al oido lo que quieren hacerme o les gustaría que les hiciera. Jamás he tenido.
No estamos. Exagerando no sabéis la temperatura que coge el bronce bajo el sol malagueño. Aquende todavía encontramos. El Bailía y, como no, la ermita que da nombradía a la plaza, la de la Doncella de La Grupo.